El dólar estadounidense cerró al alza el viernes frente a las principales monedas globales, sin embargo, no pudo retener sus ganancias anteriores y puso fin a una racha de seis semanas de ganancias consecutivas, mientras los inversores esperan con mucha expectativa la investidura del presidente Donald Trump y sobre el curso de las nuevas políticas del gobierno entrante.
Al cierre de la jornada, el índice dólar DXY que mide la fuerza del billete verde frente a un grupo de seis monedas importantes, subió un 0.41% hasta los 109.45 puntos, poniendo fin a una racha se seis semanas de ganancias seguidas.
En tanto el euro se vio presionado por el dólar para cerrar con una pérdida del 0.29% a US$ 1.027 dólares, con todo ello, la moneda europea cerró la semana con ganancia del 0.27%, su primera ganancia luego de seis semana de pérdidas consecutivas.
Durante la semana que paso, el dólar alcanzó un máximo de 110 puntos, su mayor nivel en más de dos años, un nivel que fue aprovechado por los inversionistas para realizar una toma de ganancias tras un fuerte repunte de seis semanas de alzas consecutivas, pese a este corrección las expectativas de un dólar más fuerte durante el presente año prevalecen.
El siguiente cuadró nos muestra la evolución del índice dólar DXY en semanas, con una notable recuperación luego de caer hasta un mínimo de 110 puntos, gran parte desde subida se dio en los tramos finales de las elecciones de Estado Unidos, donde el republicano Donald Trump logró imponerse sobre la candidata demócrata Kamala Harris.
Desde las elecciones presidenciales en EE UU, el dólar ha subido cerca de 10% frente a sus principales pares, según los expertos, el aumento en los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense, fruto de las expectativas de los riesgo inflacionarios por la medida del electo presidente Trump, respaldaron el reciente repunte del dólar frente a la monedas globales.
El presidente Trump a venido sacudiendo los mercados, en especial el mercado de divisas, con un fuerte repunte del dólar a nivel global, obligando a muchos bancos centrales a tomar medidas de urgencia a fina de estabilizar sus monedas ya que se prevé un dólar más fuerte durante el presente año.
Trump ha prometido imponer aranceles a una serie de productos provenientes de China y Europa, así mismo, señalo que iba a grabar a productos de Canadá y México, sus principales socios comerciales, además prometió recortar los impuestos fiscales así como también mantener un duro control migratorio, medidas que sin duda van a provocar un aumento la inflación en Estados Unidos.
Los riesgos inflacionarios por las medidas de Trump, podrían llevar a la Reserva Federal (FED) a poner fin a un ciclo de reducciones de las tasas en Estados Unidos, recordemos que el mercado en general aún mantiene las esperanza de que la FED reduzca las tasas aun que sea una sola vez.
En ese sentido, el mercado mundial estará atento a la asunción del cargo como nuevo presidente electo, esta ceremonia se llevará acabo el lunes de 20 enero, día en los que mercados estadounidense estarán cerrados al celebrar el día festivo por Martin Luther King.
Por último, según los analistas de Goldman Sachs, el mercado esta listo para reaccionar bruscamente si Donald Trump decide ir en contra de las expectativas que se han generado hasta ahora, si el discurso de Trump es tibio sobre los aranceles y las otras medidas, el mercado reaccionará positivamente generando una fuerte caída del dólar, caso contrario, si vemos a un Trump más agresivo en el discurso de sus políticas el dólar seguirá alto.
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